Prepárate para salir de viaje como nunca antes
Este no es un blog de viajes, es un blog de vida, de consciencia y crecimiento. Y viajar es una de las actividades que más nos invitan a estar presentes y a ampliar nuestra mirada.
Este no es un blog de viajes, es un blog de vida, de consciencia y crecimiento. Y viajar es una de las actividades que más nos invitan a estar presentes y a ampliar nuestra mirada.
¿Qué edad tienes? O quizás sea más oportuno preguntarte, ¿qué tan satisfecho te sientes con lo vivido a tu edad? La edad puede ser más que un número, es el recordatorio permanente de que llegará el momento en que los días, meses y años que tanto contamos dejen de existir.
Sea cual sea nuestro camino, más allá del color de nuestros sueños, de lo ambicioso que sean nuestros planes o lo específico que sean nuestros objetivos, pareciera que la fórmula que traduce aquello que anhelamos en realidad, tiene que ver más con la conciencia de lo que estamos viviendo AHORA, que con la promesa interminable de nuestros logros futuros.
Dar la espalda a lo que realmente deseamos es un hábito heredado, mal manejado, que resta a nuestra capacidad de hacernos responsables de las elecciones que hacemos y distorsiona
La confianza es el puente que nos permite caminar de oscuridad a la luz, una y otra vez, a pesar de no entender. La confianza es la que nos abre puertas a caminos nunca antes imaginados, la que nos empuja a buscar señales que normalmente perdemos de vista.
Esta época vino a traernos grandes cambios. A todos nos ha tocado redefinir nuestros valores, reorganizar nuestras prioridades, y aceptar el reto de cultivar gratitud y esperanza, muy a pesar de las circunstancias. Y para ello, el cambio al que te estoy invitando a despertar hoy, ha sido fundamental. Respira profundo. Vamos a aprender a “cambiar de enfoque”.
Sea cual sea nuestro camino, más allá del color de nuestros sueños, de lo ambicioso que sean nuestros planes o lo específico que sean nuestros objetivos, pareciera que la fórmula que traduce aquello que anhelamos en realidad, tiene que ver más con la conciencia de lo que estamos viviendo AHORA, que con la promesa interminable de nuestros logros futuros.
Los mantras son utilizados como un tipo de oración o durante la meditación con el propósito de calmar la mente y conectar con la divinidad. Mas, en un mundo tan acelerado y cambiante, la experiencia de calmar la mente no puede estar reservada a momentos de introspección.
Una forma de aceptar lo que la vida nos presenta es reconocer con qué necesitamos “hacer las paces”. Cuáles son esos momentos, personas o situaciones que hemos asumido como un bloqueo en nuestro camino.
Cuando hablamos de rendirnos, no se trata de tirar la toalla, de soltar lo que anhelamos o de sentirnos derrotados. Si no más bien, de conectar con la presencia de Dios en nosotros y colocar en ella todo aquello que necesitamos o anhelamos.